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Aunque el verano es sinónimo de descanso, los cuidados de la ortodoncia y de la boca no admiten tregua. Te contamos cómo mantener las atenciones para que, al final de este periodo, no tengas que volver a empezar el tratamiento.

Después de un comienzo de año más que convulso y de más de dos meses sin salir a la calle, el verano [por fin] ha llegado. Y con él, la relajación, una rutina más sosegada, más planes al aire libre, comidas improvisadas y todo tipo de excusas que nos sirven para estar más tiempo fuera que dentro de casa. Pero, como consecuencia de todas ellas, los hábitos de alimentación e higiene – incluidos los relacionados con la boca y, concretamente, con el cuidado de la ortodoncia – también se ven alterados.

Por estas razones, aunque los profesionales de la salud bucodental recuerdan durante todo el año la importancia de cuidar la apariencia y el bienestar de la sonrisa, con la llegada del buen tiempo intensifican sus advertencias. Desde Harmonía Dental, como especialistas en ortodoncia en El Masnou, damos algunos consejos para que el verano no eche a perder la efectividad del aparato y para que disfrutes al máximo de estos meses sin descuidar la salud de tu boca.

Decálogo del cuidado de la ortodoncia en verano

El periodo estival tiene cosas buenas y otras no tanto. No importa lo mucho o poco que te guste esta época del año: es una realidad. Para aprovechar las primeras y reducir la influencia de las segundas, existen todo tipo de consejos y recomendaciones. También en el caso concreto de la salud bucodental. Para evitar que la relajación de hábitos y rutinas arruine el buen estado alcanzado durante todo el año, los especialistas también insistimos en no descuidar la atención durante estos meses.

Diferentes entidades como la Asociación Española de Ortodoncistas (AESOR) o la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO) recuerdan que, como el resto del año, el cuidado de la ortodoncia en verano es imprescindible. Con sus recomendaciones, podemos elaborar el siguiente decálogo:

• Cuida la alimentación y evita alimentos azucarados, pegajosos o duros. Esta es la primera recomendación de los especialistas bucodentales, tanto si llevas aparato (o estás planteándote la posibilidad de llevarlo) como si no.
• Mantén o aumenta tu rutina de higiene bucodental. Aunque este consejo también es aplicable a toda la ciudadanía (sigan o no tratamiento), si llevas ortodoncia es de suma importancia. Lávate los dientes después de cada comida y presta especial atención a cada uno de los brackets, para que no se acumule en ellos suciedad. El verano es una época muy propicia para el desarrollo de gingivitis, caries, sensibilidad dental… Por ello, hay que poner todo lo que está en nuestra mano para evitar estas patologías.
• No olvides ni descuides los consejos de tu dentista para el cuidado de la ortodoncia, ni siquiera en verano. Cualquier recomendación que te haya hecho el especialista durante el año es de obligado cumplimiento también en esta época del año.
• Recuerda colocar las gomas elásticas o retenedores. Si por comodidad o por descuido las dejas en casa, los efectos y los avances conseguidos con el aparato no habrán servido para nada.
• Hidrátate bien. Como norma general, para mantener un buen estado de salud y bienestar. Pero, sobre todo, para cuidar tu sonrisa. Beber agua permite generar saliva que, a su vez, contribuye a la lucha contra las bacterias en la boca.
• La maleta no estará bien hecha hasta que no metas las férulas de ortodoncia o de descarga. Vayas a donde vayas de viaje (aunque sea al pueblo), no te olvides de todos tus tratamientos.

Disfruta y sonríe. Llevar aparato no te impide viajar, volar, disfrutar de la piscina o la playa, practicar deportes al aire libre… Solo tienes que seguir una serie de precauciones y, sobre todo, no olvidarte de exprimir al máximo el verano.