agosto 21, 2020 in Blog

Bruxismo y coronavirus: las otras consecuencias de la crisis sanitaria

Bruxismo y coronavirus

El estrés y el nerviosismo derivados de la crisis del coronavirus han intensificado la incidencia del bruxismo entre la población adulta. Te contamos cómo identificar y tratar esta disfunción nocturna.

Si cuando te despiertas sientes dolor de cabeza o de mandíbula, si presentas lesiones en la lengua y la mucosa interna de la boca o tus dientes comienzan a desgastarse de manera irregular quizá deberías plantearte la visita a un especialista de la salud bucodental. El bruxismo es un problema multifactorial que está a la orden del día. Se estima que cerca del 70% de la población adulta sufre estos episodios de movimientos masticatorios involuntarios durante la noche – según datos publicados en la revista del Consejo General de Dentistas de España – y sus manifestaciones son cada vez más diversas.

El estrés o el nerviosismo son dos de los factores que pueden favorecer la aparición de bruxismo en la vida adulta. El ejemplo más claro lo encontramos tras la crisis sanitaria desatada por el coronavirus. El confinamiento, el miedo al contagio, el cambio de rutina, el aislamiento respecto de los seres queridos, etc., han provocado un aumento de las consultas a los especialistas en salud bucodental por este problema. Si es tu caso o si quieres saber qué soluciones existen para este trastorno mayoritariamente nocturno, no dejes de leer.

Cómo ha afectado el coronavirus a la incidencia del bruxismo y cómo ponerle freno

El bruxismo nocturno, más que una afección bucal, es considerado uno de los trastornos del sueño más comunes. Se caracteriza porque, quien lo padece, aprieta o rechina los dientes durante la noche y de manera inconsciente. Es a la mañana siguiente o con el paso de los días cuando los efectos de esta disfunción se hacen visibles: dolores de cabeza o de mandíbula, contracturas, lesiones en la boca, cansancio, bloqueos en las articulaciones… En muchas ocasiones, los pacientes tardan en saber que son bruxistas.

Pero si a la predisposición habitual a sufrir bruxismo de algunas personas adultas sumamos situaciones de estrés, la condición no hace más que agravarse. De hecho, las primeras semanas de la crisis por coronavirus, se dispararon los casos de esta disfunción de la articulación temporomandibular. Entonces, con los consejos de los dentistas frente al virus siempre presentes, y ahora, los especialistas siguen trabajando en una solución que evite el avance de esta dolencia y de sus consecuencias.

¿Cuáles son los métodos más utilizados para poner fin al bruxismo? Al tratarse de un trastorno nocturno provocado por diversos factores, los especialistas se enfrentan a él desde diferentes perspectivas:

  • Las férulas de descarga son la solución más socorrida. Evitan el desgaste dental y absorben la tensión liberada por los músculos durante la noche.
  • Tratamientos farmacológicos. Sobre todo cuando se demuestra que la disfunción de la articulación temporomandibular está causada por estrés, insomnio o ansiedad, se recomienda la administración de medicamentos como los ansiolíticos junto a terapias psicológicas.
  • Sesiones de fisioterapia. Para corregir la postura y descargar la tensión muscular en todo el cuerpo, sobre todo en las zonas más afectadas por el bruxismo nocturno.
  • Otros tratamientos de apoyo como la meditación o las sesiones de relajación. Cuando el estrés o el nerviosismo dominan a los pacientes y se ponen de manifiesto a través de este trastorno nocturno, las vías de escape que le ayuden a recuperar el control siempre son bienvenidas.

Si crees que rechinas o aprietas los dientes por la noche, si padeces apnea del sueño o ronquidos poco habituales, o si te levantas con sensibilidad en la mandíbula, ponte en contacto con los especialistas de Harmonía Dental. Juntos le pondremos solución.