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Hace un tiempo te hablamos de lo frecuente que es que los niños sufran caries en sus dientes de leche. En estos casos, veíamos que la mejor solución era empastar la pieza aunque esta sea provisional para que la caries no vaya a más y así, conservarla hasta que se caiga y salga la pieza definitiva. Pero ¿qué ocurre si el empaste ya no llega a tiempo y la pieza dañada se pierde? ¿Hay que recurrir a un implante?

Pues realizar un proceso de implantología en niños pequeños cuando pierden una pieza de leche no tiene ningún sentido ya que en poco tiempo nacerá su pieza definitiva. Sin embargo, mientras esto ocurre es crucial realizar un tratamiento a base de mantenedores de espacio dental. ¿Sabes qué son y cuál es su función?

¿Qué es un mantenedor de espacio dental?

Pues como su propio nombre indica, se trata de una especie de aparato dental cuyo objetivo es mantener o conservar intacto el hueco que deja una pieza de leche que se cae de forma prematura. De esta forma, se impide que las piezas adyacentes se muevan y causan maloclusiones u otros problemas dentales.

Con los mantenedores de espacio dental se evita que las piezas cercanas ocupen el sitio que ha dejado la pieza perdida que debe estar libre para que, en el futuro, lo ocupe la pieza dental definitiva cuando salga y sustituya a la que ha caído.

¿Hay que recurrir siempre a los mantenedores de espacio dental?

Cuando se pierde una pieza dental de leche por causa de un traumatismo o de una caries, los dientes cercanos tienden a desplazarse y ocupar ese hueco. Este movimiento de piezas puede provocar un gran trastorno dental ya que la pieza definitiva no tendrá espacio suficiente para erupcionar con normalidad y adoptar la posición que le corresponde en la boca.

Con los mantenedores de espacio dental se evita este desplazamiento y se guía el crecimiento de la nueva pieza para que este se produzca correctamente y ocupe el lugar y la posición que le corresponde. Por eso, nuestro consejo es que siempre que la pieza definitiva no asome y tenga un crecimiento inmediato, lo mejor es optar por esta solución para garantizar un correcta posición de las piezas dentales en el futuro.

¿Cuántos tipos de mantenedores dentales existen?

Ya sea debido a una caries, un traumatismo, una mala mordida de un alimento duro… se puede perder una pieza de leche y colocar un mantenedor de espacio dental.

Las circunstancias de la pérdida, la edad del paciente, las características de su cavidad bucal o la posición de la pieza (si está en la arcada superior o inferior) determinan qué tipo de mantenedor de espacio dental se utilizará entre los existentes:

1.- Mantenedores de espacio dental fijos

Se fijan sobre una de las piezas adyacentes al hueco. Los más comunes son los mantenedores de banda ancha que se utilizan cuando la pieza dental definitiva aún no ha erupcionado y todo apunta a que tarde en hacerlo.

2.- Mantenedores de espacio dental removibles

Como muchos aparatos de ortodoncia dental, son de quita y pon para que el niño pueda quitarlo mientras come, por ejemplo. Suelen estar elaborados en metal y resina, resultan más cómodos aunque también pueden presentar el riesgo de no utilizarse todo el tiempo debido o que se rompan al poner y quitar. Importante ponerlos para dormir.

¿Tu hijo ha perdido una pieza de leche? Pues ven a vernos para que le coloquemos un mantenedor de espacio dental. Es la mejor opción para garantizar que sus piezas dentales no se mueven y se conserven en la posición correcta.

En Harmonía Dental, tu clínica dental en Fuengirola de confianza, haremos un seguimiento en estos casos para garantizar en todo momento la perfecta evolución y posición de sus dientes.