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Seguro que has oído hablar en más de una ocasión de la mordida cruzada. Y seguro que también sabes que se trata de un problema de maloclusión dental, aunque no tengas muy claro en qué consiste ni cuáles son las principales causas que lo producen.

Pues si quieres salir de duda no dejes de leer este post en el que te hablamos de este trastorno dental que podrás tratarte un dentista en Teià.

¿Qué es la mordida cruzada?

Se trata de un tipo de maloclusión que se produce por una incorrecta relación entre el maxilar superior y la mandíbula. Es un problema bastante frecuente que se caracteriza porque una o varias piezas dentales de la arcada superior quedan por detrás de las piezas de la arcada inferior cuando se cierra la boca.

En una mordida normal, los dientes superiores siempre sobresalen por delante de los dientes inferiores, sin embargo, en este caso ocurre todo lo contrario.

¿Qué consecuencias tiene para quien la padece?

Cuando una persona tiene un problema de mordida cruzada tendrá problemas de maloclusión que le impedirán morder bien los alimentos. Pero además, los daños pueden llegar a ser variados, algunos de ellos graves si no se corrige a tiempo:

• Desgaste de las piezas dentales que pueden llegar a perderse.
• Daños en las encías, tejidos blandos y resto de estructuras involucradas.
• Dificultades funcionales para la correcta fonación y masticación.
• Daños en la articulación temporomandibular que puede desembocar en bruxismo, dolores de cabeza, mandibulares o cervicales.

¿A qué factores se debe la mordida cruzada?

Las causas que se encuentran detrás de una mordida cruzada son variadas, aunque estas son algunas de las más comunes:

• Herencia genética: Es bastante frecuente que un niño que tiene mordida cruzada lo haya heredado de alguno de sus progenitores.
• Problemas respiratorios: Cuando una persona respira habitualmente por la boca y la tiene abierta con frecuencia, puede surgir este problema de oclusión.
• Colocación incorrecta de la lengua: Se trata de un hábito que suele adquirirse a edades muy tempranas y que contribuye a que se produzca este problema.
• Hábito de chupar el pulgar: Ese famoso “no te chupes el dedo” tiene mucho sentido ya que puede acarrear tips bucodentales como la mordida cruzada.
• Mala postura para dormir: También es bastante frecuente que este problema lo sufran niños que cuando eran bebés dormían de un mismo lado o no intercalaban los lados en las tomas.

En la mayoría de ocasiones, los motivos que causan una mordida cruzada son una mix de los que acabamos de ver.

Lo ideal es detectar este problema lo antes posible para aplicar las medidas adecuadas. En adolescentes y adultos que ya tengan los huesos de la cara formados, corregir una maloclusión se vuelve más complejo y es necesario un tratamiento de ortodoncia.

Incluso hay algunos casos en los una mordida cruzada muy severa solo puede corregirse mediante cirugía ortognática. Suele ocurrir cuando existe una mayor desviación mandibular o un paladar muy estrecho.

Por todo ello, es fundamental realizar revisiones periódicas desde muy temprana edad y acudir siempre a un dentista en Teià que pueda detectar lo antes posible este problema. Es la forma de evitar sus consecuencias y corregirlo más fácilmente. Si necesitas saber más, no dudes en consultar al equipo de Harmonía Dental.